La recuperación, como libro independiente, de uno de los cuentos de Fialho de Almeida en la editorial Assirio e Alvim desembocó en la casi inmediata traducción del mismo y su publicación por parte de la editorial española Periférica. Augusto Munaro prosigue sus rescates de títulos que obligan a reescribir la historiografía literaria con este acercamiento al rejuvenecido clásico de la literatura lusa.
Cuando La pelirroja (A Ruiva), se editó en la revista portuguesa Museu Ilustrado, por la franqueza psicológica de sus personajes, su audacia descarnada y estilo descriptivo con que retrató a la Lisboa popular y suburbial, convirtieron a su autor Fialho de Almeida, un modesto médico de una familia de Vila de Frades; en uno de los mayores escritores portugueses de la segunda mitad del siglo XIX. Esta corta y singular novela, eróticamente imaginativa, ilustra la vida desperdiciada de Carolina, hija del sepulturero de un pueblo. La niña que se crió sin madre, “abriendo mortajas y levantando tapas de ataúdes”, pronto deja su infancia para convertirse en una agraciada joven. Así es como presa de sus más voluptuosos deseos de prosperidad, y siguiendo los consejos maliciosos de una matrona alcahueta, inicia una serie de amoríos que gradualmente la llevan hacia los íntimos caminos de la degradación, aquellos plagados de vicios y miserias.
Anterior por varias décadas a Nuestra hermana Carrie, del norteamericano Theodore Dreiser (otra novela que con su temática controversial desató polémica), La pelirroja en cambio la supera en fluidez narrativa. Almeida con un estilo veloz y preciso, logra condensar en sus personajes, los complejos estados emotivos en una feliz conjunción de oraciones de extraña solidez sensitiva. Técnica que supo heredar de sus años como cronista social en numerosos de los periódicos lisboetas, donde trataba de ganarse la vida. También como ayudante de boticario del Largo de Mitelo, oficio que le permitió tratar con gente de todos los ámbitos, nutriéndose de ellos a través de cientos de historias que oía a diario.
Como Mariano José de Larra, aunque careciendo de su insuperable ironía socarrona, Almeida lega una historia lejos del sentimentalismo lacrimoso, para retratar los días de una pelirroja sin suerte ni talento que busca -como tantas otras de su clase y condición- refugio en la pasión amorosa que ella cree atisbar en João, un robusto aprendiz de carpintero. Poco importa si Carolina logra escapar, o no, de su destino aciago. La vida callejera y sin rumbo de una muchacha que, por su dolorosa ingenuidad, recuerda a personajes creados por Charles Dickens, y los otros –más desafortunados, desde luego-, imaginados por el ruso Fedor Dostoievski. De este modo, cada capítulo emana el gusto agrio que destilan los destinos trágicos, aquellos que simplemente carecen de sentido. La impotencia ante lo inevitable que lleva al lector a uno de los desenlaces más crudos e inolvidables de la literatura portuguesa de su siglo. Objetivo y anticlerical, su mirada es desencantada, la de un escritor rebelde y anarquista; enemigo de las convenciones.
Fíalho de Almeida, es conocido en su país, particularmente por dos libros. Os gatos (1889-94), de inmensa popularidad, y A cidade do vício (1890), para algunos, su mayor novela. Asimismo fue autor de Contos (1892), Lisboa galante (1890), Pasquinadas, crónicas satíricas, entre otros. Como Pío Baroja y Gottfried Benn, ambos escritores y médicos, vieron la vida sin medias tintas. No es pura casualidad que Almeida sea, a pesar de su obra fragmentaria y desigual, uno de los más importantes escritores del posromanticismo.
La presente edición de La pelirroja, es la primera que se realiza en castellano. Se trata de un libro editado con cuidado y buen gusto por un sello editorial que merece ser destacado, dado que opera a favor de exigencias de calidad literaria y no estrictamente de mercado. La traducción de Antonio Sáez Delgado resulta lisa y llanamente, excelente.
Augusto Munaro. Argentino. Publicó los libros Ensoñaciones: Compendio de Enrique de Sousa (RyC editora), El cráneo de Miss Siddal (Pánico el Pánico), Recuerdos del soñador evasivo (Alción editora), Cul-de-sac (Ediciones La Carta de Oliver), Todo sea por la excepción (Letra Viva), Gesta Cornú (Editorial Lisboa), Breve descripción de una |sepultura| (Tinta China), Noche soleada (Ediciones la yunta), Camino de las Damas (Expreso Nova Ediciones), [Hna. Paula] (El 8vo. loco ediciones), Agnès & Adrien (Colisión Libros), Vida de Santiago Dabove (Ivan Rosado), Islandia (Voria Stefanovsky Editores), A la hora de la siesta (Borde Perdido Editora), Arletty (Julieta Cartonera), Celuloide (Minibus Ediciones), El baile del enlutado (Gigante) y La página infinita (Clara Beter).
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