Esta semana Quim Monzó cumplió años. Lo que no deja de ser curioso es que Monzó nos hace regalos cada día a sus lectores. Hace ya demasiado tiempo que Monzó no publica un libro (según él para no tener que firmar en Sant Jordi), y sin embargo no falla a su cita diario con los lectores en La Vanguardia. Es de paradojas como esas de las que se nutre una de las personalidades menos dóciles y más interesantes de la literatura actual.
Hace ya unos cuantos años Quim Monzó aceptó participar en el programa El convidat, dedicándole todo un fin de semana a Albert Om, y dejándolo incluso que pasara la noche en casa con él. De ahí surge este vídeo, donde podemos vislumbrar un poco del mundo íntimo de uno de los autores más disparatados en su escritura y perfectamente serios en persona. O al revés, que viene a ser lo mismo.