Casi inhallable y poco conocido, Papur es uno de los libros que han servido para cimentar la fama de esquiva y extraña que tiene la literatura de Francisco Ferrer Lerín. Incluido dentro de esa extraña miscelánea se encontraba este texto, «Museo», que ahora tenemos el placer de recuperar en penúltiMa.
Fue el profesor y hombre de teatro Alberto Castilla Villa quien me habla de la existencia del Museo Reverte Coma (Museo de Antropología Médico-Forense, Paleopatología y Criminalística) y, pasado un tiempo, es el diseñador ofimático Macario Anula –Macanula-, quien me proporciona la información escrita de este centro madrileño –“excepcional por muchos conceptos”- proyectado para que penetremos “en las profundas simas del alma y la personalidad humana alterada, que conduce a la barbarie, a la destrucción, y a crímenes producidos por la falta de cultura, por la mala educación y por la viciosa organización de la sociedad como decía Platón.” Esta Exposición-Museo presenta, “junto al lado negro del mundo que nos rodea, los medios que la sociedad ha puesto para reprimir y combatir el crimen”, siendo la finalidad principal “explicar a las nuevas generaciones que hacer el mal no compensa, que hay que odiar el delito y compadecer al delincuente y que la auténtica felicidad está en organizarse una vida llena de servicio y de respeto a los derechos de los demás.” Enumeramos, a continuación, los epígrafes de las secciones en que se halla divida la muestra, deteniéndonos en algunos detalles de especial dramatismo y en la constatación del uso preeminente de la copia en esta cátedra de la historia de la ciencia moderna.
- Colección de cráneos medievales. (21 vitrinas)
- Sección de Paleopatología. Con 4 vitrinas en las que se exponen huesos con lesiones variadas. Se incluye la reproducción de una pierna completa arrancada por una mina antipersonal.
- Archivo judicial. Comprende 3 vitrinas llenas de cráneos pertenecientes a individuos asesinados y algunos a asesinos como el histórico Tulisán Mateo Yunga.
- Sección de Paleontología. En vitrina doble 125 reproducciones de los cráneos más famosos del mundo en el capítulo de la Evolución. En otras dos grandes vitrinas reproducciones de eslabones perdidos.
- Colección de cráneos medievales trepanados.
- Sección de Tanatología Forense. Contiene momias bolivianas salvadas de ser convertidas en polvo por la acción de insectos y ácaros.
- Colección de Teratología Forense. Consta de momias de niños, niños nacidos monstruosos, talidomídicos, abortos, hidrocéfalos de diversa intensidad, fetos momificados, y una colección de fotografías de monstruos, cíclopes, pigópagos, esternotoracópagos, siameses, prosopotoracópagos, driposopos, amiélicos, focomiélicos, anencéfalos, molas, etc.
- Colección de cráneos exóticos. Consta de un centenar de piezas.
- Colección de Anatomía Comparada. (2 vitrinas). De gran interés por las preguntas que siempre nos hacen los jueces acerca de si se trata de huesos humanos o animales.
- Colección de armas homicidas.
- Sección de Criminalística.
- Colección de instrumentos antropométricos antiguos.
- Colección de antiguos instrumentos de la Escuela de Medicina Legal.
- Sección de Toxicología. Consta de una vitrina en la que se conserva el Botamen Merck de Darmstad. Otra vitrina contiene más de 200 cajas de productos farmacéuticos donados por visitantes del museo, colección que está en constante crecimiento.
- Colección de animales tóxicos, ponzoñosos.
- Sección de terrorismo.
- Sección de narcotráfico.
- Falsificaciones, timos.
- Instrumentos policiales de diversas épocas. Entre los que destacamos porras americanas de plástico comprimido y dos máscaras antigases. Hay expuesta un arma-instrumento muy curiosa, obsequio del famoso comisario D. Antonio Viqueira Hinojosa recientemente fallecido, que se utiliza para rajar la cara o para rajar los bolsillos y sustraer el billetero. Esta arma es conocida por “el chino” igual que la lesión facial típica que se inflige con ella.
- Instrumentos utilizados por ladrones de pisos. Sección que contiene cuerdas de escalo con triple gancho, cuerdas de escalo con nudos, cuerdas de escalo con descansillo, ganzúas, palanquetas, cortafríos, hundidores de cerraduras, pelucas rubias, etc.
- Colección de paneles luminosos con fotos transparentes. Destacaríamos en el Panel de Asesinos Famosos a algunas envenenadoras, a bandidos de Sierra Morena –Pancha Ancha, El Vivillo- , a asesinos en serie españoles –El Escalero, El Legionario- y a varios ladrones de cadáveres. En el Panel de Etnobotánica a un indio de la tribu tchikao fabricando una “macana” de madera, arma muy eficiente para romper cabezas y por su filo hasta para cortarlas. En el Panel de Paleopatología, grandes ampliaciones en color de lesiones óseas medievales como tumores, enanismo, acromegalia, deformación craneal tolosana, leontiasis, lepra, y también cremaciones del primer milenio a.C. y un cráneo peruano con apero deformador.
- Instrumentos fabricados por presos. De varios presidios se obtienen instrumentos fabricados por presos, unos para intentar evadirse, otros para matar o defenderse, otros para adorno, otros simplemente como expresión de un arte personal.
- Chamanismo, brujería. Una vitrina con muñecos de vudú, raíces de mandrágora, akualelegana de los neles, inatuledis y absoguedis panameños, cuerda peruana para practicar la eutanasia por estrangulamiento, mano adivinatoria de porcelana, otras dos de plástico, figuras con priapismo y una rueda azteca de los katunes.
- Nuevas colecciones. Valiosas piezas como el cráneo del criminal de Sierra Morena llamado “El Fantasía” y un garrote vil, generosamente usado, instalado en su soporte de madera con banquillo y una figura (fantomas de ensayo balístico) colocada en posición para mostrar con fidelidad cómo se realizaban las ejecuciones.
- Crímenes ecológicos.
- Colección de fotos enmarcadas de antiguos maestros de la Medicina Legal, y Ciencias afines.
- Reproducciones de cabezas de asesinos famosos. Una vitrina con reproducciones en plástico especial (en curso de ejecución) y reproducciones en madera procedentes de Guatemala.
- Colección de mascarillas funerarias. En escayola.
- Colección funeraria egipcia.
Objetivos del Museo: tradicionalmente dedicado a jueces, forenses, policías y detectives, también se abre al público en general dadas las grandes posibilidades didácticas que encierra. Se toman citas por teléfono a grupos de 30-40 personas; tiene un convenio con la ONCE y existe un libro de visitas.

Si hay un escritor con una biografía a la altura, sino incluso más legendaria, de su producción ése es Ferrer Lerín (Barcelona, 1942). Entre sus iniciáticos poemarios de los años sesenta y setenta y su «retorno» a la publicación a mediados de la década pasada se dedicó, sobre todo pero no sólo, a la ornitología, en concreto al estudio y conservación de aves carroñeras en el Pirineo. Hoy, desde Jaca, se ha convertido en una figura inquieta y subyugante que publica libros sin cesar, mantiene un blog o varios y se permite, incluso, experimentar con nuevos formatos. http://ferrerlerin.blogspot.com.es/ sirve como botón de muestra de esa profusión creadora. Su entrada en la Wikipedia parece el resumen de una novela de aventuras, y aún así permite sospechar que es un pálido reflejo de su peripecia vital.
Posdata es la sección en que los autores reciclan o ponen de nuevo en circulación textos bajo su decisión y criterio. En penúltiMa somos muy partidarios de las relecturas, así que compartir de nuevo esos textos nos llena de regocijo.
exactamente un individuo,
por Rubén J. Triguero
nueva columna de Martín Cerda
adelanto del nuevo libro de
Javier Payeras
Antología de cosas pasajeras
por Javier Payeras
de Henry David Thoreau,
leído por Rubén J. Triguero